Pekín, 23 de Agosto, a las 21:15 (15:15 hora Española) en el
estadio Nacional de Pekín se disputa la final de los 100 metros lisos
masculinos, una de las pruebas que más expectación levanta en el mundillo atlético
y que este año viene con un morbo añadido.
Desde los Juegos Olímpicos de Pekín, en el 2008, la
velocidad mundial tiene nombre y apellidos: Usain Bolt.

Su superioridad en las dos pruebas, 100 y 200 metros lisos
era indiscutible y el aficionado ya no se cuestionaba su victoria, sino que
marca podría llegar a realizar el genio Caribeño.
Después del mundial del 2013 Bolt decidió tomarse una
temporada más tranquilo, el año no fue de los mejores y a la falta de pocas
competiciones se le sumaron unas inoportunas lesiones que hicieron que el
Jamaicano apenas apareciera sobre le tartán, sus actuaciones se limitaron a
simples exhibiciones.
Este año se presentaba como el de su regreso a la gran competición,
sin embargo sus primeras apariciones sobre el tartán hicieron saltar las
alarmas comenzó con un 200 en Ostrava donde se impuso con una
discreta marca de 20.13 y sin causar una gran impresión, algo que pronto se
encargó de despejar nuestro protagonista afirmando que era la primera competición
del año y que su mejor estado de forma aun estaba lejos del ideal, sin embargo
su actuación en la Diamond League de
Nueva York hizo saltar las alarmas. Volvió a imponerse, pero con una discretísima
marca de 20.29 y ante rivales muy inferiores, sus sensaciones fueron muy malas y
tuvo que esforzarse hasta la misma línea de meta para no verse superado.
Tras esta mala carrera Bolt anunció que su presencia en las reuniones
de París y de Lausana quedaba suspendida por unos problemas físicos y pronto se
supo que el atleta iba a viajar a Alemania para ser tratado de unos problemas físicos
por el discutido y a la vez afamado doctor Hans-Wilhelm
Müller- Wolhlfahrt. Sus métodos incluyen sustancias nada convencionales
como el Actovegin, derivado de la sangre de ternera, y otras más comunes como
el Hylart.
Chema Olazabal, P.
Radcliffe, Meseret Defar, Tyson Gay, Maurice Greene o Linford Christie son
algunos de los deportistas que pasaron
por su consulta. En el Campeonato del Mundo de Berlín 2009 se aseguró que cinco
de los ocho finalistas de 100 metros habían sido tratados por él.
Las dudas sobre su participación en el mundial de Pekín se
acrecentaron y ya eran muchos los medios de comunicación que dudaban de que en
estos mundiales pudiéramos ver a Usain.
Sin embrago la última reunión de la Diamond League celebrada
en Londres deparó una gran sorpresa a todos esos escépticos.
Bolt que anunció su participación en el hectómetro de este evento,
aseguraba en la rueda de presa previa que en el Mundial correría los 100, 200 y
el relevo 4x100 y que estaba seguro de que su estado de forma en Pekín iba a
ser el ideal para poder disputarle la victoria a sus rivales.
Unas palabras que se encargó de plasmar sobre el tartán del
estadio Londinense que lo coronó como medallista Olímpico 3 años atrás.
Se impuso en las semifinales con una marca de 9.87, en un día
donde la lluvia y el frío, así como el viento en contra, no les puso las cosas fáciles
a los velocistas. En la final volvió a repetir marca para imponerse a sus
rivales. Bolt está de vuelta a un mes de la cita más importante del año.
Gatlin no se perdió detalle de la reaparición de Bolt, el
atleta Neoyorkino era la gran sensación del año, y el gran favorito a la victoria
en el mundial que comienza en poco menos de un mes.

Ambas marcas son las mejores del año en ambas pruebas, por
lo que el americano era y es aún, el gran favorito al Oro en Pekín, algo que no
gusta mucho en determinados sectores del mundo atlético y es que el turbulento
pasado de Gatlin levanta sospechas e indignación a partes iguales entre muchos aficionados.
Gatlin ha sido suspendido por dopaje en dos ocasiones, la primera
de ellas en su época como estudiante, cuando en el 2001 resultó positivo por
anfetaminas, una sustancia que el mismo alegó que estaba tomando desde su
infancia para combatir el déficit de atención que le habían diagnosticado, una
vez vistas sus alegaciones la IAAF le redujo su sanción a 1 año. En el 2006
Gatlin igualaba el récord mundial de los 100 metros, en posesión de Asafa
Powell, con una marca de 9.77, en Mayo y
en Doha, mismo lugar elegido para comenzar también esta misma temporada, sin
embargo en el mes de Agosto de ese mismo año la USADA le comunicó al
Estadounidense que había vuelto a dar positivo en un control antidoping, esta
vez por testosterona, al ser su segundo caso la pena sería suspensión de por
vida, sin embargo la Agencia antidopaje de Estados Unidos los sancionó con 8
años, Finalmente, el Tribunal de Arbitraje de Estados Unidos le redujo la
condena a cuatro años.
Este año Gatlin es la gran referencia mundial de la
velocidad, en Pekín Bolt deberá verse las caras con un atleta del que llegó a
decir que jamás correría a su lado.
La lucha entre Bolt va mas allá de lo deportivo, es una
lucha entre el “bien y el mal”, muchos son los que piensan que si Gatlin gana a
Bolt será la victoria de la trampa frente al trabajo y el talento. Tras los
9.87 de Bolt la puerta de la esperanza se ha vuelto a abrir, el estadio
Nacional de Pekín nos dirá se es solo una pequeña esperanza o una gran
realidad.